Todo pasa por algo

Antes yo era uno que creía que en la vida, absolutamente todo pasaba porque nosotros mismos con nuestro propio albedrío lo permitíamos. Pero esta percepción de la realidad me ha cambiado porque hay muchas circunstancias que suceden que son completamente independientes de nuestras propias decisiones y muchas veces nos afectan directa o indirectamente. Por eso ahora he empezado a creer que de verdad muchas de las cosas que suceden, es por algo… A veces es porque hay cosas que no nos convienen o bien porque realmente son cosas que tenían que pasarnos tarde o temprano. En este viaje a la playa, para citar un ejemplo, cuando salimos para ir a otras playas cercanas, equivocamos el camino en algún momento y nos fuimos por otro lado y tuvimos que devolvernos… Que desperdicio de tiempo y gasolina diría cualquiera… Pero a la vuelta ya de noche cuando uno viene más perdido y sin mucha visibilidad… volvimos a equivocar el camino y al pasar por el mismo paisaje nuevamente, ya estábamos completamente familiarizados con el lugar y fue fácil percatarnos de la perdida por segunda vez. De noche, hubiera sido más difícil y quien sabe donde hubiéramos llegado a parar si no hubiera sido porque ya en la mañana habíamos cometido el mismo error… Es decir… fue un error que en sí mismo, tuvo su propósito.